La isla de San Borondón es probablemente la isla más intrigante para todos los habitantes de las Islas Canarias. Su leyenda es parte de la cultura local y su búsqueda es una historia interminable, incluso hoy en día, con toda la tecnología disponible.
Durante muchos años, se ha llamado a la isla en muchos cuentos, romances, poemas y canciones folklóricas "la misteriosa, la perdida, la inalcanzable". Basadas en esos rumores persistentes, se iniciaron muchas expediciones desde el siglo XV hasta el siglo XVIII, la más conocida fue en 1721 bajo las órdenes de Juan de Mur y Aguirre, un almirante; y se dibujaron muchos mapas navales. Pizzigano dibujó un mapa de San Borondón en el siglo XV, Toscanelli en el siglo XV, y en el siglo XVI los ingenieros P. Cazorla y L. Torriani dibujaron un mapa detallado de la isla que, según ellos, debería medir 480 km por 155 km ( eso sería una gran isla!) y estaría ubicada a 550 km NO del Hierro y a 220 km OSO de la Palma. El historiador Abbey Galindo incluso la situó a 10º10'Oeste; 29º30´Norte. Pero la isla, obviamente, nunca fue descubierta y ha dado lugar a muchas y controvertidas polémicas.
Ya durante la época griega, las leyendas sobre islas que emergían y desaparecían eran muy populares, ya que se alimentaban de calamidades como la destrucción de la actual Santorini. Por otra parte, de acuerdo con un poema del siglo VI dC, un monje irlandés San Brandan de Clonfert (480 - 576) se embarcó con otros 14 monjes en el Atlántico, hasta que arribo a una isla. Mientras celebraban una misa y encendían un fuego, la isla comenzó a moverse y resultó que la isla no era tal, sino una ballena gigantesca. Abandonaron la isla, volvieron a casa y así nació la leyenda.
Con el fin de entender el misterio que se generaba durante la Edad Media a partir de una isla desconocida o que desaparecía misteriosamente, podemos compararlo con lo que actualmente sentimos con nuestra búsqueda de planetas desconocidos. Y, hoy en día, nosotros disponemos de imágenes y / o mediciones de estos objetos para controlar nuestra imaginación. Sin embargo en aquella época no había ninguna posibilidad de generar datos exactos, excepto el llegar a la isla en sí. Hay algunas historias que documentan una arribada a una isla que estaba habitada y que con frecuencia estaba azotada por fuertes y repentinas tormentas. Otras historias hablan sobre el avistamiento de una isla desconocida al Oeste de La Palma, La Gomera y El Hierro, pero que cuando se acercaban a ella, se cubría de repente por la niebla y luego desaparecía. Así fue que esta isla que desaparecía obtuvo el nombre del autor de la leyenda de las islas que desaparecen: Saint Brandan o, en español, San Borondón. La leyenda comenzó a tener su vida propia cuando en 1479 fue incluida oficialmente en un tratado entre España y Portugal, alegando que pertenecía a las Islas Canarias y por lo tanto a España. La existencia de la octava isla canaria había comenzado, y por lo tanto su búsqueda.
Como han demostrado muchos ejemplos en el pasado, puede haber algo de cierto en el avistamiento de esta isla, tanto si fuera por un fenómeno meteorológico, por una Fata Morgana (espejismo), o por un correcto avistamiento y un posterior malentendido en su localización. Después de todo, las leyendas de dragones estaban alimentadas por los antiguos descubrimientos de cráneos de dinosaurios, tal vez incluso del Tyrannosaurus Rex, pero en aquel momento aquellos que los encontraban o estudiaban no sabían interpretarlos correctamente.
En el caso de que el avistamiento fuera una Fata Morgana, y el conocimiento meteorológico moderno sobre los patrones climáticos locales parece cuadrar con tal evento, la imagen que se habría visto podría haber sido la de La Palma. La silueta de la isla podría coincidir con algunos dibujos de la época.
Una variación en el tema de la Fata Morgana es que la imperturbable área entre las 4 Islas Canarias, La Gomera, El Hierro, La Palma y Tenerife, y las islas "Las Salvajes" situadas a unos 165 km al norte de Tenerife, permiten un fenómeno poco común llamada "Reflexión atmosférica", que significa que en algunos días con un poco de niebla la luz solar refleja la imagen de la isla más grande hacia las nubes, que a su vez la reflejan de nuevo en una superficie del mar con niebla cerca de las 4 islas dando la impresión de que la imagen está cerca de una de esas 4 islas. Una especie de billar óptico.
En el caso de que el avistamiento fuera verdadero, tenemos que buscar en los datos de entonces y tratar de coincidir con ellos los datos que tenemos hoy en día.
- La isla debería estar al oeste del archipiélago / norte de Tenerife
- Debería tener 3 montañas, divididas en dos grupos de montaña dominantes, con un bosque en el medio.
- La isla se definía como inaccesible y podía desaparecer entre la niebla o las nubes
- Un mapa del siglo XVII situaba San Borondón en el norte de Tenerife
- Un dibujo muestra una isla con una forma ovalada, otro dibujo muestra una isla con forma alargada
- Algunos avistamientos se han reportado desde la costa norte de Tenerife
Si utilizamos Google Earth® para buscar candidatos, nos encontramos con Madeira, en el NNO, Las Salvajes en el NNO, y mucho más lejos, las Azores al NNO. El grupo de islas más cercano a las Islas Canarias son las Salvajes, que están formadas por dos grupos: una isla que mide 1,5x1,5 km y un grupo de pequeñas islas que en conjunto abarcan una superficie de unos 2x2km a unos 15 kilómetros por debajo del primer grupo. La isla más grande tiene una altura de unos 163m y el grupo de islas más pequeñas está cubierta por el mar durante la marea alta, pero se ve con marea baja durante la luna llena o nueva, con una altura de unos 2 m (!) Debido a la forma redonda de la tierra, uno sólo puede ser testigo de este fenómeno en la proximidad, es decir, a un par de millas. Pero al llegar a la zona con un barco de vela después de un par de horas, la isla más baja ya podría haberse sumergido de nuevo debido a los movimientos de las mareas...
In the case that the sighting was a Fata Morgana – and modern meteorological knowledge about local weather patterns seem to allow for such an event – the image that would have been seen could have been that of La Palma. The silhouette of the island could match with some drawings from that period.
A variation on the theme of Fata Morgana is that the undisturbed area between the 4 Canary Islands – La Gomera, El Hierro, La Palma and Tenerife – and the islands “Las Salvajes” that are situated some 165 km to the north of Tenerife, allows for a rare phenomenon called “Atmospheric Reflection” which means that on some slightly foggy days the sunlight reflects the image of the larger island onto the clouds, which they in turn reflect it back on a foggy sea surface near the 4 islands which will give the impression that the image is close by one of those 4 islands. Some kind of optical billiard.
In the case that the sighting was genuine, we have to look for the data from then and try to match those with what we see today.
the island should lay in the West of the archipelago / the North of Tenerife
La forma de la isla más grande de "Las Salvajes" se corresponde en gran medida con uno de los dibujos que se hicieron en el siglo XVII. Si se tiene en cuenta que las islas sumergidas podrían haber sido interpretadas desde la distancia como una isla, entonces esta isla imaginaria tendría la forma de la isla alargada documentada. El grupo de islas "Las Salvajes" ahora pertenecen a Portugal. La isla principal tiene agua potable, es desértica con suelo rocoso, tiene costas cortas y empinadas y arrecifes traicioneros que hace que sea casi inaccesible. Tiene tres montañas (!), La más alta mide 163m.
Alucinación o interpretación equivocada de observaciones reales, cualquiera que sea la historia correcta, nos ha dado una leyenda entretenida que sigue existiendo, incluso después de miles de años. La cultura del sonido está hecha de este tipo de tradiciones.
Michel
Fuente: www.elcanario.net / Bruno Perera; E. J. Benedicto; Wikipedia