En el próximo artículo, trataremos de demostrar cómo y por qué nuestra mente y su estado afectan a nuestra salud y bienestar. Y cómo poder escapar de las posibles influencias negativas.
Hace un par de años un científico llamado Herbert Specter del Instituto Nacional de la Salud llevo a cabo el siguiente experimento: administro a un grupo de ratones una sustancia química, la Poly-A-C, que fortalecía su sistema inmunológico. Al mismo tiempo expuso a los ratones al olor del Alcanfor, otra sustancia química. Al cabo de un rato, los ratones estaban estimulando su sistema inmunológico al oler el Alcanfor. A otro grupo de ratones se les administro el producto químico Ciclofosfamida, que destruye el sistema inmunológico. A su vez se les expuso al olor del Alcanfor. Después de un rato estos ratones empezaron a destruir su sistema inmunológico al oler el Alcanfor. Tenia así dos grupos de ratones: un grupo al oler el alcanfor estimula su sistema inmunológico, y el otro grupo al oler el alcanfor destruye su sistema inmunológico.
Entonces administró a ambos grupos una misma cantidad de carcinógeno y sólo el grupo que había sido programado para destruir su sistema inmunológico murió al cabo de unas semanas; el otro grupo ni siquiera enfermó!!!! Se repitió el mismo test administrando ahora Neumococos. Y solamente el grupo programado para destruir su sistema inmune murió de infección pulmonar.
Así que la única diferencia que se encontraba esta en la interpretación de la memoria al oler el alcanfor.
El mismo mecanismo lo podemos aplicar a nosotros, los seres humanos. Estamos expuestos a ciertas memorias, las conectamos a ciertos estímulos e inducimos las mismas reacciones una y otra vez. Nos convertimos en victimas de nuestros recuerdos y la tragedia es que nuestro demonio del hoy es nuestro recuerdo del ayer.
Tenemos unos 60.000 pensamientos al día, de los que cerca del 95% son idénticos a los de ayer. Literalmente somos un montón de reflejos condicionados que constantemente reaccionan a la gente y a las circunstancias a través de reacciones bioquímicas predecibles y patrones de comportamiento. Si nuestro cuerpo cambia tanto- un cambio completo se produce cada 2 años y medio, como ya hemos descrito en otros artículos- por qué es que seguimos sufriendo de artritis? Por qué todavía existe el cáncer? Por qué todavía se bloquean las arterias? Porque todavía usamos el mismo flujo de quantos y las mismas pautas que son responsables de la situación actual. Imagina que pudieras cambiar una vez al año cada ladrillo de una casa. Pero como estamos atrapados en el supuesto de que el presente es la única forma posible, acabaríamos la misma casa siempre, hasta con sus mismos fallos.
El siguiente experimento se llevo acabo en la Universidad de Miami, y se publico en el “Diario de Pediatría de Florida”. Se dividieron bebes recién nacidos en dos grupos: a un grupo se les tenía en sus cunas provistas de aperturas en un lado a través de las cuales los científicos les daban abrazos durante 6 minutos, 3 veces al día. Al otro grupo de bebes no se les dio ningún abrazo. La denominación científica oficial para esta acción se llamo “Estimulación kinestetica- táctil-caricias”. Nosotros lo llamaríamos amor... A ambos grupos se les dio la misma cantidad y tipo de comida. El resultado sorprendente del experimento fue que aquellos bebes a los que se les dieron regularmente abrazos gano de un 40 a un 50% mas peso que a los que no se les abrazó
El departamento de salud de Massachusetts ha llevado a cabo recientemente otro estudio sobre los factores de riesgo en enfermedades de corazón como el colesterol, la hipertensión, la diabetes,…etc. La razón de este estudio estaba en que las estadísticas de estudios previos mostraban que la gente que sufría un fallo cardiaco entre los 40 y 50 años no presentaba ninguno de estos factores de riesgo, en un modo estadísticamente significante! Entonces, cuales eran las causas?
Sus descubrimientos fueron: el nº 1 en factores de riesgo es la insatisfacción en el trabajo. El nº 2 en factores de riesgo es la infelicidad interna (desdicha general).
Otro descubrimiento sorprendente de este estudio es que en el mundo occidental la mayoría de la gente muere de fallo cardiaco el lunes entre las 8 y las 9 de la mañana. Esto es algo sorprendente, chocante y único! Solo la humanidad puede mostrar este comportamiento ya que somos la única especie que sabe del lunes o del martes. Y donde esta la diferencia? Una idea, un concepto, una interpretación! Pasamos tantos elementos ocultos o triviales y conceptos a nuestro cuerpo que lo condicionamos de ese modo. Incluso el concepto del tiempo. Por favor leed este dramático ejemplo: hace un par de años un grupo de 7 mineros alemanes quedaron atrapados en una mina. Solamente uno de ellos llevaba reloj. Para no desanimar a sus compañeros les dijo cada 2 horas que había pasado sólo una. Después de una semana los rescataron vivos a todos menos al que tenia el reloj!! Aunque el era capaz de modificar la experiencia temporal colectiva subjetiva, no pudo engañarse a si mismo. Estuvo demasiado pendiente de su reloj. El tiempo es un concepto, no una realidad. Y este concepto, como muchos otros, nos están condicionando constantemente y tienen un efecto apreciable en nuestra salud. Depende de nosotros, lenta pero constantemente, el evolucionar a un ser realmente consciente que sea capaz de liberarse de los comportamientos condicionados del día a día. Demos es pequeño paso que se convertirá en un gran salto para la humanidad y para nosotros mismos, al igual que hicieron nuestros antepasados cuando evolucionaron de humanoides a seres humanos.
Michel Robeers